Opinión
¿Piratas políticos asaltan Puebla?
La sucesión prematura con su entusiasmo desbordado atropella todo a su paso hasta llegar al borde del precipicio.
Como ocurre con el brote de presuntas candidaturas al gobierno poblano desde los rincones de partidos políticos y en los pasillos del Palacio de Gobierno. Y aún hay quien espera que la tómbola le brinde una oportunidad.
La vida siempre es una alacena llena de oportunidades, pero también de riesgos que deben asumirse con responsabilidad.
Un diagnóstico valora las condiciones de vida política de nuestra entidad poblana. Mario Patrón, un impulsor de los derechos humanos da cuenta de su situación precaria al revelar su culminación con un retroceso en caída libre: “en seis años Puebla nombró seis gobernadores”.
Más artículos del autor
Las condiciones del deterioro que sufre el estado es espeluznante. De ocupar en el pasado lejano la segunda ciudad de importancia del país ha retrocedido a ser la última entidad peor evaluada, desbancando al Estado de Guerrero quien por tiempo indefinido ahí se alojaba.
La calidad de la democracia que ostenta es reprobatoria, en el orden de 4.264
Por lo que se refiere al sistema penal, Puebla ocupa el quinto de los últimos lugares, cuando su tradición jurisdiccional era todo lo contrario, como también lo confirma el tercer lugar, en el Índice de Percepción de Corrupción.
Tan ilustre tradición de siglos ahora se arrumba por la incompetencia de sus políticos usufructuarios que la llevaron a la indigencia del pensamiento y al despojo del quehacer público.
Tan ilustre de un lado como indignante, el deterioro presente donde se ocultan los responsables, los usufructuarios de los beneficios, y usurpadores de la función pública ocupada sin cumplir la responsabilidad: piratas del presupuesto.
POR LA AFIRMATIVA
La piratería política prevalece en nuestro estado desde el “salinato”, cuando la convirtió en “tiradero” de gobernantes sin identidad ni compromiso local. Las imágenes de entonces suelen coincidir con las presentes, nada más, los mismos actores con papeles diferentes.
No resulta extraño ver ahora como aspirantes a la “nómina” del Estado a los fantasmas del pasado reencarnados en actos anticipados de campaña financiados con derroche de recursos públicos o de oscuros orígenes. Las imágenes de las elecciones pasadas se muestran congeladas con rostros ahora envejecidos en el otro lado de la trinchera que antes pelearon en un priismo añejado.
La piratería turística provoca indignación. Su presencia de fin de semana encubiertos con la burocracia de dirigentes de partidos para venir a decirnos cómo deben gobernarse los poblanos, quién los tiene que gobernar, pero acaso, ¿no la sabiduría poblana alcanzó límites extra continental?, ¿y todavía nos dicen que no sabemos gobernarnos?
Los cargos de responsabilidad en funciones de políticas públicas y de bienestar deberían evitar el contagio de ocupar o cubrir cargos de elección o restringir más su acceso a fin de no confundir su vinculación administrativa con derivar los beneficios privados con recursos públicos, como suele ocurrir en el trasfondo de un conflicto de interés.
No se acaba el asombro cuando asoma la temeridad de los representantes texanos del Partido Republicano pidiendo la declaración de terroristas a los narcotraficantes a fin de facilitar que los marines otra vez invadan México.
El desafío descomunal propició la declaración del presidente López Obrador al proclamar que México es soberano, no es una colonia ni un protectorado.
Pero el asombro llega al infinito ante el silencio sepulcral de Morena, tanto en su Dirección como en su versión del Congreso.
¿Por qué el Presidente le debe responder a un congresista republicano cuando sus pares nacionales son a quienes les corresponde, aún más a sus legisladores? ¿Acaso el Presidente naufraga en aguas procelosas sin apoyos?
APROBADO EN LO GENERAL
Dentro de las variables que determinan el centro de unanimidad o totalidad que busca Morena para mantenerse en el poder, se localiza en las relaciones con los Estados Unidos, las cuales se encuentran atrapadas por la sucesión de Biden.
El ocupante de la Casa Blanca se verá forzado a endurecer su línea ante el nacionalismo supremacista de los republicanos quienes neutralizados o superados por el hombre de la Casa Blanca buscarán un túnel de escape que es México, para descargar toda la provocación posible hasta mostrarlo como responsable de sus inconformidades.
Asumir los riesgos de la campaña electoral de ambos países requieren de una política de fronteras con visión de estadista para evitar actos emotivos, el crear la comisión bilateral es útil y conveniente.
¿Avanzar en sentido de cooperación responsable?
Vistas: 545
Loadind...