La terna para el Poder Judicial

Jorge Rodríguez/El Sol de Puebla

La consumación del proceso electoral extraordinario en favor del candidato a gobernador de la coalición Juntos Haremos Historia, Luis Miguel Barbosa Huerta, significará el adiós del magistrado Héctor Sánchez Sánchez como presidente del Tribunal Superior de Justicia.

Sánchez Sánchez, vuelto titular del Poder Judicial del Estado en enero de 2018, en la breve administración de José Antonio Gali Fayad, debía permanecer en el cargo hasta febrero de 2021, cuando venciera el periodo de cuatro años que comenzó con Roberto Flores Toledano en los albores del 2017.

El abrupto cambio de régimen, que se registra de manera gradual en la entidad, derivado de la muerte de los dos integrantes de la pareja Moreno Valle-Alonso, así como el abultamiento de las acusaciones vertidas en contra del magistrado presidente, algunas de ellas exhibidas a nivel nacional, pusieron fecha de caducidad a la gestión del otrora síndico en el ayuntamiento de Puebla.

Héctor Sánchez no llegará al próximo febrero, mes en que se renuevan los ciclos anuales al frente de ese poder, como máximo responsable de la impartición de justicia en el estado, se afirma entre los colaboradores del abanderado a gobernador que lidera todas las encuestas de preferencia electoral.

Incluso se asegura que, a menos de dos semanas de que se lleven a cabo las votaciones para elegir al relevo de Guillermo Pacheco Pulido, ese mismo candidato ha revisado los perfiles de aquellos magistrados que podrían sustituir al presidente y ha elaborado ya una terna.

Según la fuente, de los 26 magistrados que componen el Tribunal Superior de Justicia, los tres que son considerados para asumir la presidencia son Margarita Gayosso Ponce, Ricardo Velázquez Cruz y Alberto Miranda Guerra.

Los tres han sido críticos incisivos de la manera en que se conduce el Poder Judicial, no solo en los tiempos actuales, pero Miranda Guerra se ha asumido como un rival casi personal del presidente en funciones.

Quizá por eso están en la terna.

El plazo fatal se cumplirá el domingo 2 de junio.

A partir de entonces, como gobernador electo, Barbosa tendrá que discutir los detalles del relevo con los actores de la vida política nacional que fueron encomendados por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, para revisar y depurar todas las ramificaciones del Poder Judicial en el país.

Lo de Sánchez Sánchez, subrayan esos mismos colaboradores, tiene que ver con política y nada más.

Los futuros dueños del poder no prevén desterrarlo del Tribunal; solo removerlo de la presidencia para poner ahí a uno de los suyos.

Igual que en el pasado, con otras administraciones estatales.

Así que, si trabaja usted en el Poder Judicial y se topa este día con alguno de los probables favorecidos, o con los tres: Margarita Gayosso, Ricardo Velázquez y Alberto Miranda, abrácelos fuerte y dígales al oído que siempre ha creído en su vocación y sus talentos para encabezar tan importante labor por Puebla y los poblanos.

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