Exasperación de Fernando Morales por encontrar vacías las cuentas bancarias del PMC

Por La Jornada de Oriente | Miércoles, Marzo 14, 2018

Fermín Alejandro García/ Cuicatlán/La Jornada de Oriente

Cuentan que entre todos los líderes de la coalición Por Puebla al Frente a quien menos le calienta el sol es a Fernando Morales Martínez, el dirigente del Partido Movimiento Ciudadano (PMC), por haber encontrado vacías las cuentas bancarias de la agrupación que encabeza. Y ese coraje se acrecentó porque la causa de ese quebrando no se provocó dentro del PMC, sino es por obra y gracia del morenovallismo.

Literalmente en la sede nacional del PMC le dijeron que si realmente quería querellarse con alguien por la falta de presupuesto, que le fuera a echar pleito al ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, quien es su verdadero jefe político.

A finales de septiembre del año pasado, de la manera más desaseada, se sustituyó a José Ángel Pérez García como dirigente del PMC y en su lugar se impuso al ex priista Fernando Morales Martínez, cuyo nombramiento se hizo sin tomar en cuenta a las bases del partido y a quienes habían conducido a esta fuerza política en los últimos cuatro años.

Esa manera autoritaria de llegar al cargo provocó que el hijo del ex gobernador Melquiades Morales Flores no dialogara con los dirigentes salientes y por ende, no se informó de la situación real por la que atraviesa dicho instituto político, que actualmente es una deslucida franquicia del morenovallismo.

A las pocas semanas de llegar al puesto, Fernando Morales se desesperó de no encontrar los varios millones de pesos que suponía había de prerrogativas en esta fuerza política. Su exasperación creció a tal grado, que acusó a su antecesor José Ángel Pérez García de haber desfalcado al PMC.

La queja contra Pérez García, quien actualmente es diputado local, la llevó ante los órganos nacionales del PMC, en donde el bisoño dirigente exigía proceder penalmente contra el legislador de su propio partido.

Esa actitud bravucona llegó a su fin hasta que alguien cansado de su insolente reclamo, le pidió revisar la historia reciente del partido en Puebla:

Resulta que en 2015 surgió la alianza entre Dante Delgado Rannauro, el dirigente y cacique del PMC, y el entonces gobernador Rafael Moreno Valle Rosas. Por eso, desde Puebla en ese año habría salido fuertes sumas de dinero para financiar la campaña electoral del Partido Movimiento Ciudadano en el estado de Jalisco, que es el actual bastión de dicha fuerza política.

Como parte de esos acuerdos, en Puebla se violentó la norma de financiamiento a los partidos político y se determinó que las prerrogativas del PMC no se entregaran a la dirigencia local, sino a la cúpula nacional de Movimiento Ciudadano. Fue un “favorcito” del morenovallismo a Dante Delgado.

Por eso entre los años 2016 y 2017, el PMC se convirtió en un cascaron, ya que en el partido no había proyectos, vida interna, y no se postuló candidato en la pasada renovación de la gubernatura de Puebla. Ello era, en mucho, consecuencia de que no había dinero ni para pagar las cuentas de luz y agua.

Ahora que Fernando Morales reclamó las prerrogativas del PMC, le sugirieron que hablara con Rafael Moreno Valle Rosas y Dante Delgado para desbaratar sus acuerdos. Entonces mejor optó por el silencio y tragar sapos.

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