En 23 años del TLCAN, Puebla multiplicó 34 veces su inversión extranjera
Por El Sol de Puebla | Martes, Agosto 22, 2017
Carolina Vega/El Sol de Puebla
La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) amenaza la economía de Puebla. La apertura comercial permitió a la entidad federativa -cuyo Producto Interno Bruto (PIB) depende en un 19 por ciento de las exportaciones a Estados Unidos- multiplicar 34 veces la atracción anual de inversión extranjera entre 1994 y 2016.
Puebla está desde 1994 oficialmente abierta al mundo. El 1 de enero de ese año entró en vigor el TLCAN, tratado que prometía unir para siempre las vocaciones comerciales de Canadá, Estados Unidos y México. Poco más de dos décadas después este compromiso se tambalea.
El presidente del país vecino, Donald Trump, aseguró desde su campaña electoral que acabaría con el superávit en comercio bilateral del que disfruta México, modificando, con aranceles, nuevas normas técnicas o restricciones a la exportación, un tratado que sí ha beneficiado, en términos generales, a Puebla.
En 1991, cuando el TLCAN se firmó pero aún no entraba en vigor, el estado atrajo un flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) de 15.4 millones de dólares, según cifras de la Secretaría federal de Economía (SE). Una década después, en 2001, este monto ascendía ya a 777.9 millones de dólares.
En 2016, la última cifra anual hecha pública por la dependencia federal, la apuesta de las empresas de capital extranjero por Puebla ascendía a mil 31 millones de dólares. Este número multiplica por más de 34 veces los 29.9 millones de dólares registrados en 1994, el mismo año en que entró en vigor el TLCAN.
Sólo en 2016 el flujo de IED en Puebla procedente de Estados Unidos ascendió a 121.7 millones de dólares, convirtiéndose en el tercer país con mayor presencia económica en el estado, tras Bélgica (que durante idéntico periodo invirtió 229.9 millones de dólares) y Alemania (471.5 millones de dólares).
ESTADOS UNIDOS, DESTINO DE EXPORTACIONES POBLANAS
Estados Unidos, actor fundamental del TLCAN, es precisamente el destino de la mayoría de las exportaciones poblanas. El 62.4 por ciento del volumen de bienes enviados al extranjero desde nuestro estado llega al país vecino, de acuerdo con el estudio El impacto de la integración económica de México con Estados Unidos a nivel estatal, hecho público por la organización México, ¿cómo vamos?.
Puebla supera así, por ejemplo, a la Ciudad de México, donde poco más de la mitad de las exportaciones, equivalente al 53 por ciento, se dirige a Estados Unidos. “19 estados destinan menos del 80 por ciento pero más del 60 por ciento de sus exportaciones al vecino del norte y únicamente tres estados, Quintana Roo, Baja California Sur y la Ciudad de México destinan menos del 60 por ciento de las exportaciones estatales a Estados Unidos”, comparó el análisis. “Sin embargo, al menos la mitad de las exportaciones de cada estado de la República mexicana se dirigen al vecino del norte”.
La dependencia económica de la entidad federativa hacia Estados Unidos, motivada por la falta de diversificación de su comercio, se refleja además en el valor de estas exportaciones respecto a su PIB. El envío de productos ‘made in’ Puebla a territorio estadounidense equivale al 19 por ciento de la riqueza generada en su territorio.
“La variación entre estados en el impacto de las exportaciones hechas a Estados Unidos como proporción del PIB estatal es aún mayor”, apuntó México, ¿cómo vamos? “En Baja California y Chihuahua, éstas representan más del 100 por ciento del PIB de cada estado, mientras en Quintana Roo la proporción es menor a 0.5 por ciento”.
SECTOR AUTOMOTRIZ, ÉXITO DE APERTURA COMERCIAL
El sector automotriz mexicano, y poblano, ha sido beneficiado por el tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, gracias a las facilidades de exportación de vehículos y los bajos salarios pagados a los obreros.
En 1993 existían en el país, según el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, 10 plantas de fabricación de vehículos ligeros pertenecientes a cinco marcas, entre ellas la fábrica de Volkswagen de México en el municipio poblano de Cuautlancingo; en la actualidad ya son 18 de ocho empresas. Entre estas últimas se incluye Audi de México, con sede en el municipio poblano de San José Chiapa.
“Recientemente, con la nueva administración gubernamental en Estados Unidos, que advierte la probable salida de ese país del TLCAN o modificaciones arancelarias a las armadoras instaladas en México, se abre una circunstancia que ha inundado de incertidumbre no sólo a la industria, sino a toda la economía nacional, cuyo intercambio internacional depende fuertemente de la interrelación comercial con ese país”, advirtió el estudio La Industria Automotriz en México y el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN).
Esta inquietud ha llegado hasta Volkswagen de México, cuya producción se destina en un 80 por ciento a mercados foráneos, principalmente Estados Unidos. El vicepresidente de Relaciones Corporativas de Volkswagen de México, Carlos Luna, reconoció que la empresa seguía de cerca la renegociación del tratado. “En todos lados existe la preocupación bajo las declaraciones que tenemos pero vamos a trabajarlas y sabemos que estamos en buenas manos con el licenciado Guajardo -secretario federal de Economía-“, afirmó.