La indefinición del indefinido Ricardo Anaya

Por Excélsior | Lunes, Junio 26, 2017

Literalmente atrincherados tras un sinnúmero de legalismos electorales y disposiciones estatutarias (interpretadas a modo), la administración en turno de Acción Nacional, encabezada por el indefinido Ricardo Anaya Cortés, aprovechó la pasada reunión de su Comisión Permanente para, otra vez, patear el bote... buscando ganar tiempo en la construcción de condiciones que posibiliten la autodesignación del queretano como candidato aunque, en esta ocasión, debió pagar costos indeseables como, por ejemplo, tener que aceptar, en los hechos, su íntima aspiración de cara al 2018.

Ello, amén que a contrapelo de la versión que sobre el referido encuentro intentó imponer la dirección del blanquiazul, la reunión del jueves no fue, en forma alguna, ni una suerte de paseíllo para su dirigente que, diría alguno de sus voceros, logró “desactivar la presión” en su contra ni, menos, se constituyó en foro idóneo para el reencuentro de quienes, siete hasta el momento (si se asume con seriedad la postulación del impresentable Miguel Ángel Yunes), pujan por encabezar al panismo en los estratégicos comicios.

Por ello entonces, y aun cuando no estaba previsto por sus *solícitos afines, es que Anaya acabó aceptando la urgencia de dar la cara, con seriedad, y atender a la creciente tensión interna y riesgo de división provocada por su terca resistencia a aceptar de manera pública —(pues) “ello le obligaría a dejar la dirigencia que tan bien utiliza en favor de su personal posicionamiento…”— lo que en privado no sólo externa sino que, incluso, es el único móvil de su gestión directiva.

Planteamientos como el de José María Martínez que, en breve intervención, no hizo más que dejar en claro que “yo no le estoy diciendo que renuncie; sólo le estoy pidiendo que se defina…”, pusieron a pensar a más de uno que, como Luis Felipe Bravo o el senador Héctor Larios ante la insistencia del anayismo de “acogerse a los tiempos legales y estatutarios”, no dudaron en advertir que “problemas políticos (como los existentes ahora) se resuelven políticamente…” y no con retórica legaloide.

Igual ocurrió con la propuesta de Margarita Zavala de dar forma a una “mesa de diálogo” u otra instancia que permita confrontar ideas y posiciones a los aspirantes pues, mientras sus afectos abogaban por ello, los leales al queretano insistían en posponer toda acción de cara a la elección de 2018, alegando que ello les impediría bajar el nivel de confrontación existente, amén que, incluso, no faltó quien asegurara que “si instalamos una mesa así, la prensa se encargará de hacerla fracasar…”.

Patear el bote pues, insistamos, y hablar de piso parejo cuando la ruta panista hacia las presidenciales, para los aspirantes se entiende, bien podría servir para explicar cómo es que se encuentran hoy las principales vialidades de la capital del país suena, al menos, ridículo…

ASTERISCOS

* En ese marco, hay que destacar la encerrona con liderazgos de 20 estados que, el fin de semana, realizó el senador Juan Carlos Romero Hicks que, por otra parte, sumó ya a su causa a Ramón MuñozEduardo SojoCarlos Medina PlascenciaPedro CerisolaEugenio ElorduyJavier Usabiaga y José Espina, entre otros

* Es un hecho, a decir de fuentes priistas (casi siempre atinadas), que Jorge Carlos Ramírez Marín será quien ocupe la presidencia de la Mesa Directiva en San Lázaro a partir del 1 de septiembre. Ello, afirman, amén de que César Camacho “podría dejar la coordinación” para ir al Estado de México, en apoyo de Alfredo del Mazo.

* Ingresos multimillonarios a las arcas nacionales por concepto de licitaciones petroleras (57 mil millones de pesos) y gasoductos por 12 mil millones, más seis mil millones de dólares para estaciones eléctricas en tres años, evidencian las bondades de la Reforma Energética, asegura Emilio Gamboa, coordinador senatorial priista.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/enrique-aranda/2017/06/26/1171940