El síndrome de El Peje contagió al Joven maravilla

Por Excélsior | Viernes, Septiembre 23, 2016

Le tundieron ayer a Ricardo Anaya. Culpa suya. Le entró el “síndrome López Obrador”. Como lo hizo en su momento el tabasqueño, el jefe nacional del PAN dejó su lugar vacío en el debate televisado entre aspirantes presidenciales del PAN, que organizó el movidísimo conductor de Televisa, Carlos Loret de Mola.  

En el estudio estaban Margarita Zavala y Rafael Moreno Valle. Y enlazado, desde Chihuahua, Gustavo Madero, quien ya se descartó para la grande. 

El exjefe del PAN ya dijo que él no va por la candidatura, pero aprovechó la cobertura del canal 2 para apoyar la exigencia de Margarita a Anaya para que defina públicamente, y a la brevedad, si va o no a buscar la candidatura presidencial del PAN, en el 2018.

En corto, todos sabemos que el “Joven maravilla” sí quiere, pero no puede confesarlo en razón de que ocupa la jefatura nacional del PAN. Ser árbitro y jugador pone dispareja la cancha. Favorece su proyecto, gana simpatías, aprovecha los spots en medios electrónicos.

En el CEN del PAN nos dicen que, como jefe del partido, Anaya debate con los presidentes de otras agrupaciones políticas y con el gobierno. “No desea polemizar con otros panistas en medios de comunicación”, nos dijo el vocero  del CEN, Fernando Rodríguez Doval.

http://www.excelsior.com.mx/opinion/francisco-garfias/2016/09/23/1118524