Sánchez Farfán abandona al PRI y se une a las filas del Panal

Julio César Sánchez Farfán dejó a principios de la presente semana el cargo que tenía en el Comité Directivo Estatal del PRI y migró al Partido Nueva Alianza (Panal), como parte del proceso de captación de cuadros priistas por parte de la segunda de estas fuerzas políticas, que tiene su base de operación en las dos secciones locales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.

¿Cuál es la relevancia de esa deserción?, ¿es sólo un cambio más de camiseta de un dirigente partidista?, ¿ese movimiento puede tener un peso importante en el actual proceso electoral federal y en los comicios locales que habrá el próximo año?

Todo indica que la salida de Sánchez Farfán puede significar una muy importante pérdida para el PRI y que no es cambio más, sin mayor importancia o repercusión en el ámbito electoral.

Resulta que este personaje tenía una experiencia laboral en el PRI de algo así como de 20 años.

Y que durante esas dos décadas se desempeñó manejando toda la información de la operación electoral del PRI.

Es decir, le tocó controlar las bases de datos de militantes, seccionales, grupos de apoyo y operación electoral, así como información estadística del voto duro y eventual del tricolor, en los momentos en que este partido era hegemónico, casi invencible, hasta las épocas de alta competencia o cuando el PRI tuvo su peor derrota electoral –en el año 2010–, pasando por un proceso en el cual la mayor parte de la estructura priista acabó siendo dominada por el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.

Su cambio de camiseta representa una verdadera pérdida para el PRI. No es algo menor, por la información que posee dicho personaje y que seguramente ahora se utilizará en contra del instituto político que antes le dio cobijo.

Lo grave de esta situación es que la presidente del tricolor estatal, Ana Isabel Allende Cano, no se ha percatado de la gravedad de la salida de Julio César Sánchez Farfán.

Y es que en general cada semana que pasa crece la percepción de que el PRI poblano no tiene rumbo, ni estrategia ni la más mínima idea de cómo enfrentar el actual proceso electoral, ya que quien lleva el timón, es decir Ana Isabel Allende anda extraviada en asuntos de poca o ninguna relevancia para el tricolor.

Un ejemplo de lo anterior es que este lunes Ana Isabel Allende estuvo en la sede estatal del PRI entregando camisas –con el emblema estampado del tricolor– a los operadores electorales del PRI. Frente a ese hecho uno se pregunta: ¿Para qué le sirve al partido esa actividad? La respuesta es muy simple: para nada, sobre todo cuando la contienda ya está encima.

Quien tendría que encargarse de los asuntos internos y de organización del partido es Víctor Gabriel Chedraui, el secretario general del Comité Directivo Estatal, y quien tendría que ser la responsable de proyectar la imagen del PRI hacia la sociedad, hacia el electorado y las fuerzas políticas rivales es Ana Isabel Allende, pero eso no ocurre.

La dirigente priista ha dejado ir oportunidades de oro para posicionar electoralmente a su partido.

Allende estuvo ausente en el enorme malestar que causó el fraude de la verificación vehicular, que dejó agraviados a más de 400 mil automovilistas que no pudieron cumplir con ese trámite, y a los casi 400 mil que sí lo hicieron y que de nada sirvió que cumplieran en tiempo y forma, en medio de desmesuradas filas de espera y malos tratos, ya que al final hubo una prórroga para realizar la revisión.

Tampoco ha podido decir “esta boca es mía” en el tema de miles de despidos de burócratas del gobierno del estado y del Poder Judicial, de quienes no se han respetado sus derechos laborales y hasta no hace mucho, eran la base del voto duro del PRI.

Hasta ahora, no existe el más mínimo mensaje de solidaridad del tricolor con los trabajadores que han sufrido la política laboral represiva de Moreno Valle.

Todo este comportamiento de Allende sigue abonando la idea de que la elección ya está pactada para que el PRI se deje derrotar.

http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2015/04/01/deserta-del-pri-valioso-operador-electoral/