PRI crea candidaturas por cuotas de poder e ignora a militancia

Por La Jornada de Oriente | Jueves, Noviembre 20, 2014

La presidente estatal del PRI, Ana Isabel Allende Cano, ha sido rebasada por los tiempos y su propia inexperiencia, razón por la cual se está construyendo la lista de candidatos a diputados con base en la repartición de cuotas entre las facciones del partido y no se está tomando en cuenta la opinión de las bases priistas ni de las estructuras, ni tampoco se está midiendo el posicionamiento popular de los aspirantes ni se han buscado perfiles de ciudadanos que reviertan la crisis de imagen que el tricolor y el presidente Enrique Peña Nieto enfrentan a nivel nacional.

Aunque la dirigente ha adoptado un discurso beligerante contra el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas, como un esfuerzo por mostrar al tricolor como una verdadera fuerza opositora, hacia el interior del partido no se logran articular planes, ni las definiciones mínimas de cómo se orquestará la próxima campaña electoral, y no se logran aterrizar las ideas que supuestamente iba emprender Allende para sacar al tricolor del marasmo en que se encuentra.

Tal situación plantea una dirección débil y sin rumbo de Ana Isabel Allende, quien está convirtiendo al PRI en una torre de Babel en donde cada facción protege sus parcelas de poder y no existen proyectos que sean resultado del consenso de los grupos. Cada corriente trabaja para sus intereses y nadie se unifica.

Una muestra de ese comportamiento errático del PRI es que los diputados locales priistas en el actual periodo ordinario de sesiones del Congreso han mantenido una actitud –una vez más– de complacencia y sometimiento a los intereses del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas. ¿O ha escuchado usted algún posicionamiento crítico e los legisladores tricolores?

Es tan débil la presidencia de Ana Isabel Allende que en el reparto de cuotas de poder en torno a las posibles candidaturas a diputados una de las facciones que está siendo favorecida es la del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, quien se supone que tendría que ser el rival a vencer del PRI.

Por esa razón el gobernador panista de Puebla hasta ahora avanza en empujar las posibles candidaturas de por o menos cinco incondicionales:

Fernando Morales Martínez, en el distrito de Ciudad Serdán; Silvia Tanús Osorio en el distrito 11 de Puebla, Juan Pablo Piña en la región de Teziutlán y Juan Manuel Celis Aguirre –el líder estatal de Antorcha Campesina– en Izúcar de Matamoros, en donde además se tiene una segunda opción en la persona de Gerardo Islas Maldonado, el líder del Partido Nueva Alianza, y en Ajalpan se impulsa a Arcelia Córdova, quien también es una dirigente de la organización antorchista.

Con tal injerencia del morenovallismo suenan falsas y huecas las palabras que este miércoles pronunció Ana Isabel Allende de que el PRI está cansado de los abusos de Moreno Valle, cuando los intereses del jefe del Poder Ejecutivo están metidos hasta la cocina del tricolor.

El actual escenario plantea que si el PRI le va bien en el proceso electoral en curso será resultado de que Moreno Valle fue a negociar a Los Pinos ayudar al tricolor para que gane la mayoría de los distritos del estado, como una manera de que el mandatario mantenga una sana relación con el presidente Enrique Peña Nieto.

Y si Moreno Valle se decide a salir a luchar para que el PAN o el PRD ganen la mayoría de los distritos, no le costará mucho trabajo con el gris desempeño de Ana Isabel Allende, la falta de cohesión entre los priistas y la postulación como candidatos de personajes con mala fama, mediocres o desconocidos entre la población.

Dicho de otra manera, la suerte del PRI en Puebla sigue dependiendo del morenovallismo.

Resulta incomprensible que se quiera postular a priistas desacreditados, como es el caso de óscar Aguilar por el distrito de Zacapoaxtla, quien siempre enfrenta acusaciones por timos y cuyo único mérito es que lo está ayudando José Encarnación Alfaro, el secretario de Organización del PRI nacional.

O que se quiere nominar a Juan Pablo Jiménez Concha por Cholula, luego de que fue un mal alcalde del municipio de San Pedro Cholula, o se quiera entregar la postulación de Zacatlán a Mariana Moguel Robles, quien es una desconocida en esa demarcación. Ambos casos constituyen una cuota que se le está dando a Juan Carlos Lastiri, el subsecretario de Sedesol, quien a su vez promueve a Moguel Robles por el único mérito de ser hija de su jefa, Rosario Robles Berlanga.

Tampoco se entiende que en la lista de aspirantes se encuentre la delegada de la Procuraduría Agraria, Isabel Merlo Talavera, como aspirante del distrito de Atlixco, pese a que ya fue legisladora por esa zona y enfrentó acusaciones de que poco o nada le interesaban los problemas de la región. Su presencia se debe a que es incondicional del ex candidato a la gubernatura Javier López Zavala.

La consecuencia grave del PRI no tenga un desempeño relevante en el actual proceso electoral es que se esfumará la única opción que había de que existiera una oposición partidista al gobierno autocrático de Rafael Moreno Valle Rosas.

Esa situación no le entienden los actuales dirigentes del PRI estatal, que todavía no comprenden en dónde están parados.

http://www.lajornadadeoriente.com.mx/2014/11/20/candidaturas-del-pri-solo-seran-por-cuotas-de-poder-y-no-por-posicionamiento/